dissabte, d’abril 14, 2007

Relatos cortos (V)

¡Hola lectores!
Hace mucho que no actualizo... pensé en hacerlo para semana santa, pero esa festividad no merecía la mayor preocupación, en fin...
Seguiré con la campaña de Sant Jordi* o sea que pondré algún otro relato corto... a ver cual pongo hoy...
Ah, sí, os pongo éste:

El orden de los valores altera nuestra vida

Todo empezó una tarde de verano, tan sólo hace un par de meses.
Yo estaba sola y aburrida, tumbada en el sofá del salón, asándome de calor, porque no teníamos aire acondicionado. Vi aquel folleto, sobre la mesa de café, Carlos lo debía de haber sacado del buzón.
Lo cogí y lo ojeé. Nada interesante, la publicidad de unos cursillos de natación, otros de mecanografía… pero al llegar a la última página vi uno de los cursillos, uno que me podía interesar. Era de pintura al óleo. Y como que cada tarde me quedaba sola y medio adormiscada a causa del bochorno, decidí apuntarme.
Al día siguiente, después de salir del trabajo y haber hecho una comidita ligera, me acerqué a la academia donde impartían las clases.
Al entrar noté el que el aire acondicionado estaba encendido, una fresca brisa rozaba suavemente mi cuello descubierto. Sólo por eso ya estaba feliz de haber decidido emprender ese proyecto.
Poco a poco vi que aquella sala se iba llenando de alumnos que también pretendían apuntarse. El profesor llegó a las cinco tocadas. Un hombre de cierta edad, ojos grises color ceniza, labios finos y piel arrugada. También me di cuenta de que su cabeza lucía una larga coleta a la cual ya le quedaba poco cabello.
Nos hizo pasar a una sala bastante amplia y muy soleada, que hacia un fuerte olor a pintura y aguarrás.
Me senté al lado de una chica aparentemente un par de años mayor que yo; frente a un caballete de pintura, en un taburete de madera de abeto, rústico.
Había traído los materiales que encontré de los que indicaban en el folleto. Una paleta, pinceles de diferentes medidas, algunos tubos de pintura y un botecito de aguarrás.
Ese mismo día empezamos a pintar, él nos dio un lienzo.
Al llegar a casa Carlos hizo la cena, y me preguntó cómo me había ido el taller. Yo le contesté que muy bien, que era divertido.

El ultimo día del taller fue el 10 de julio, Y el profesor quiso que me quedara porque quería hablar con migo. Me extrañé, pero después de la clase me esperé un rato. Estaba contemplando unos cuadros y algunas esculturas que había colgados en las gruesas paredes, cuando de pronto vi llegar al profesor con una mujer que parecía ser muy estirada y estricta. Me comentaron que les gustaban mis pequeñas obras, y que estarían encantados de llevarme a Londres, donde se celebraría en Septiembre una exposición de arte donde participaban principiantes.
La verdad es que nunca había sido mi deseo, pero la idea me maravilló y pensé que podría estar bien.
Aunque empezara en Septiembre, tendríamos que partir a mediados de Agosto, para las preparaciones y todo eso que dijeron utilizando una jerga profesional, de la cual entendí poco.

Hice mi camino hacia casa con una sonrisa en la cara. Me imaginaba lo bien que me lo pasaría con toda aquella gente, y también me imaginaba mi vida siendo famosa si, gracias a aquello, lo podía conseguir.
Todo serian lujos… y fiestas, y exposiciones… podía ser maravilloso.
Llegué a mi casa y bajé de las nubes.
Carlos estaba en casa porqué ya tenía vacaciones. Era hora de decírselo a mi novio…
Al principio me felicitó y se alegró muchísimo, pero después le dije que me tendría que marchar a Londres, yo sola, y eso le desanimó un poco, pero me dijo que podía hacer lo que quisiera, si eso me hacia ilusión.

Lo medité durante varias semanas, hasta que al fin llegó el día de preparar las maletas, y decidí que me iría.
Sí… la exposición fue todo un éxito, tanto que el profesor me ha dicho que me llevará a otra de mas nivel… dice que sirvo… pero… ¿esto me gusta de verdad?
Ya no veo a nadie de los que de verdad eran importantes para mi, y les hecho de menos, tengo miedo de que se olviden de mi. Porqué ahora mi vida ha cambiado, ha cambiado demasiado… era perfecta antes, y me empeñé en cambiarla…
No entiendo como simplemente el hecho de mirar la propaganda del buzón me puede haber cambiado tanto la vida…
Quizás no me quede aquí y vuelva con los míos… con mi vida de antes…

*(si queréis ver los relatos que he presentado para el concurso del cole, podéis acceder desde aquí; mi seudónimo creo que ya lo sabéis todos... http://ies-sabadell.xtec.net/~tic/sjordi07/)

2 comentaris:

Anònim ha dit...

hola maca!!!
pues nada decirte que los relatos que me he leido (no me los he leido todos xk no me daria tiempo), estan muy bien como los otros que, aun me quedan por leer,,xD EN FIN,,xD que sepas tambien que te doi las gracias x todo lo que has echo ;-)=)
nunca cambies

Anònim ha dit...

hols
bueno, aunque ya lo habia leido me gusta releerlo así siempre hay algo que se pasa por alto como las pelis cuando las vuelves a ver.

me gustan mucho tus relatos y siempre estoy esperando con ansia el siguiente, ( que no se te termine la inspiracion )jiji
besitos te quiero